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jueves, 6 de octubre de 2011

Analisis de El Shaddai




Hola amigos, como están? Acá les dejamos nuestro primer análisis. El juego elegido es El Shaddai, en su versión para PS3.
Esperamos que les guste!!! Comenten lo bueno y lo malo, nos va a servir de mucho!!!



El Shaddai:

Aunque no vaya a quedar entre los primeros puestos de ventas, sin duda, El Shaddai es una de esas obras que los más fanáticos de los videojuegos no podemos dejar de jugar.

Un título cargado de religión y surrealismo, en el que nos meteremos en la piel de Enoc, un soldado enviado por Dios, que se emprende en la búsqueda de los siete ángeles caídos para devolverlos al reino de los cielos, o castigarlos, dependiendo de su voluntad.

Para eso, pasará alrededor de 300 años en la tierra, para luego infiltrarse, de una manera más que repetitiva, en los mundos creados por estos ángeles rebeldes, ayudado por la presencia de nuestro simpático amigo Lucifer. Que es representado por un hombre joven, muy elegante, que se comunica con Dios por medio de un teléfono móvil, para mantenerlo al tanto de nuestros progresos en la 
aventura. Además, su presencia, nos servirá para guardar la partida.

Aunque, a primera vista, la historia parezca comprensible, puedo asegurarles que es uno de los argumentos más enredados que he conocido. A pesar de haberlo intentado, sus creadores no lograron generar un argumento atrapante. La cantidad de nombres mencionados y los distintos detalles de la historia, no hacen más que llevarnos hasta un terreno de confusión del que sólo querremos salir para apreciar el increíble arte del juego. Sin duda, lo más positivo de esta entrega por lejos.

Nos sentiremos, casi en todo momento, dentro de una obra surrealista pocas veces vistas en un juego, cautivante, casi hipnotizante. Rodeados en muchos momentos de lugares celestiales. Una versión nipona del Libro de Enoc del Antiguo Testamento, con personajes al estilo anime y modelados, nada más ni nada menos que, por Sawaki Takeyasu, diseñador de los de Devil my cry u Okami.

Sin lugar a contradicciones, podemos afirmar que, en Ignition Entertainment, creadores de Swarm y  Mercury Meltdown, han realizado un trabajo excepcional a nivel arte. Pensamiento del que escribe: Si Dalí hubiese tenido la oportunidad de modelar el universo de un juego, seguramente se asemejaría a varios de los entornos vistos en El Shaddai. Salvando las distancias, por supuesto.

Cada uno de sus niveles es una composición pictórica. Esto ayuda a que ninguno  se parezca entre sí. Esa es una de las cosas que más sorprenden y se agradecen, ya que la jugabilidad no es el punto fuerte de la entrega, como ya aclaramos. Por momentos dudaremos si estamos jugando al mismo juego. Ya que sus escenarios son tan variados y distintos que nos lo plantearemos más de una vez.

Pasaremos de lugares dominados por los colores oscuros, a niveles de tonos pasteles y en 2D. Si, en 2D!!! Una gran noticia para los que amamos lo retro. Sin mencionar otro tipo de escenarios, que no queremos contarles para no arruinarles otras sorpresas que nos depara el juego.

Su jugabilidad?  Bastante básica. No tendremos más que presionar el cuadrado (en PS3, que es la versión que probamos) o el triángulo, porque los dos cumplen la misma función. Además, dispondremos de tres armas que, si las utilizamos correctamente (cosa no muy difícil), nos bastarán para eliminar cualquier enemigo que se nos aparezca por ahí: un arco que resulta ser una cuchilla luminosa y que se destaca por su velocidad. Un círculo con el que lanzaremos unas especies de plumas que, al mantener apretado el cuadrado (con el que le pegaremos siempre a nuestros enemigos) volarán en distintos sentidos, generando combos también muy veloces y fuertes. Y la última, un escudo bastante poderoso que se dividirá en dos al momento del ataque, y se unirá en la defensa. Pero con la desventaja de ser lento.

Otro aspecto destacable es la dificultad, no por el manejo, sino por los enemigos en sí. Debo admitir que lo he jugado en fácil y, sin embargo, algunos son bastante complicados y nos la harán pasar mal. Aunque las batallas son bastante cortas.

Un aspecto decididamente malo? La aventura es súper lineal, al estilo Final Fantasy XIII, y los enemigos que aparecen en ella se presentan en lugares increíblemente obvios. Cada vez que nos topemos con un perímetro circular y abierto, con toda seguridad, aparecerán entre dos o tres enemigos. Es eso negativo? Por supuesto. El factor sorpresa se pierde totalmente y estaremos siempre preparados para las batallas.

Para los más exigentes, podemos afirmar que los gráficos de los personajes y modelados no están a la altura de los últimos juegos de PS3. Tranquilamente podemos confundir al juego con una versión HD de la anterior generación, tan de moda en estos tiempos.

Pero, más allá de estas críticas, es un juego perfectamente jugable, aunque sea, por lo menos, para disfrutar de esos bellos paisajes con los que nos deleitan y de su divertida, pero sencilla y repetitiva, mecánica de pelea. Ni hablar si sois fanáticos de los animé con grandes batallas.

En conclusión, un juego con un arte fenomenal, con una variedad enorme de niveles (ninguno es igual a otro, ni parecido), un modelado de personajes al estilo anime muy bueno, con el toque de Sawaki Takeyasu, y muy atrapante. Todo el tiempo querremos saber qué tipo de escenario espectacular nos espera a la vuelta de la esquina…

Acá les dejamos un link de un trailer del juego de la TGS...


QUE LO DISFRUTEN!!!
Los saluda su amigo Janto

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